Al introducirse en el universo Bitcoin, resulta común recurrir al amigo experto en economía y finanzas, y las respuestas más probables serán: «Es una estafa piramidal, evítalo, te desplumarán, es para ingenuos que no entienden de economía». Sin embargo, rara vez estos amigos harán el esfuerzo para entender en profundidad Bitcoin y sus características únicas. Generalmente, tienden a agrupar todo el criptomundo y a destacar sólo lo que les resulta llamativo. La realidad es que, hoy en día, comprender Bitcoin requiere un esfuerzo importante debido a la abundancia de información confusa, y no es sencillo escoger las «autoridades» adecuadas que te orienten. Además, tal comprensión desafía los cimientos de tus creencias fundamentales, y requiere una apertura de mente para la cual no todos están preparados. Y los economistas en particular parten con cierta desventaja en esta área pues les hace rechinar mucho más que al resto la propuesta de valor de Bitcoin.

Si alguna vez has tratado de explicar qué es Bitcoin a un economista, habrás encontrado dificultades en varios aspectos:

  1. No compartís el mismo «lenguaje». Bitcoin tiene su propio argot, el cual ellos no encuentran relevante.
  2. Ellos están acostumbrados a su terminología propia y a las verdades universales, y les resulta difícil cambiar su marco de referencia.
  3. Se ven a sí mismos como los expertos en economía, mientras que los entusiastas de las criptomonedas están, en su opinión, cayendo en un esquema Ponzi.

Usualmente, ya tienen conciencia de que el montaje económico actual es precario (por no llamarlo chiringuito). El principal problema para muchos, incluidos los economistas, es que Bitcoin y la blockchain, su tecnología subyacente, son radicalmente diferentes a cualquier cosa que hayamos visto antes. No es solo una nueva forma de dinero, sino también una nueva forma de pensar el valor, la confianza y un concepto completamente desconocido para todos: la descentralización.

Hay varios puntos que requieren una mente abierta y un análisis profundo, tanto en el concepto como en su aplicación real. Para ello, creo que es útil explicar estos nuevos conceptos con los siguientes ejemplos:

Transmisión de valor de persona a persona y a cualquier parte del planeta. Al igual que Internet nos permite enviar información de cualquier punto del planeta a cualquier otro, Bitcoin permite mover valor económico de cualquier punto a cualquier otro, sin intermediarios. Ante la objeción de que hay países donde el acceso a internet está restringido y que los estados podrían limitar el uso de Bitcoin, podemos argumentar que, al igual que con el conocimiento y la tecnología se pueden sortear las limitaciones de internet, Bitcoin puede ser restringido por algunos estados, pero su funcionamiento no puede ser completamente interrumpido mientras se tenga una forma de conectarse a internet. El riesgo de que se corte el acceso a internet es inmensamente bajo, por lo que la posibilidad de que Bitcoin no se pueda utilizar debido a regulaciones también es extremadamente baja.

Descentralización. Este es uno de los conceptos más difíciles de asimilar. Estamos absolutamente acostumbrados a que todo está protegido y supervisado por alguna entidad central, y que exista un activo que no puede ser controlado ni embargado por el estado nos vuela la cabeza. Alvaro de María explica que esto redefine el concepto de propiedad al que hemos estado acostumbrados toda la vida. Hasta ahora, las cosas son tuyas porque si alguien te las quita, el estado ejercerá su monopolio de la violencia para recuperarlas (o al menos fingirá hacerlo). Para poseer Bitcoin no necesitas que ningún estado te defienda, si sólo tu tienes tus claves sólo tú podrás usar esos Bitcoins. Para este ejemplo me gusta recordarles que ya los gobiernos intentaron frenar el intercambio p2p mediante BitTorrent y otros prohibiéndolo y persiguiendo su difusión y que a día de hoy sigue operativo aunque no oigamos hablar de ello en los medios.

Blockchain. Es el libro contable inmutable que indica quién posee cada Bitcoin. Uno de los desafíos es entender que los bitcoins no están físicamente en el USB o en tu ordenador. Los Bitcoins están en la Blockchain, y en tu USB o en tu billetera digital están las llaves que te permiten transferirlos a otra persona. Por lo que para la autocustodia, si estás mas tranquilo teniendo dos llaves en dos sitios diferentes podrás hacerlo sin problemas.

Minería. Al igual que los bancos generan dinero a través del crédito, los mineros generan nuevos Bitcoins a través de la Prueba de Trabajo, que consume electricidad (no es gratis generarlos) y asegura la red. Aquí te pido que imagines a Bitcoin como una empresa que tiene un contrato con quienquiera que desee minar Bitcoins para cumplir el objetivo de ser un medio de transmisión de valor de punto a punto. Hoy en día, hay 396 millones de TeraHashes de poder de cómputo trabajando en esto, lo que indica que suponiendo que todos los equipos sean S19 (uno de los modernos), que tiene una capacidad de 90 Terahashes por segundo, hay 4.4 millones de máquinas trabajando voluntariamente para asegurar la red de Bitcoin. Para mí, este punto es crucial para que comprendan que no es un pequeño grupo de nerds intercambiando cromos. Un portátil normal apenas es capaz de hacer unos cuantos MegaHashes por segundo. Cuando les explicas que ese hardware está diseñado y construido específicamente para minar Bitcoin, empiezan a percatarse de la magnitud del proyecto subyacente.

Hash Rate de la red de Bitcoin

El precio de Bitcoin. En este punto, el tema es que el precio de Bitcoin se rige por la oferta y la demanda, nada más. La red continuará operando de la misma manera independientemente del precio. Ya sea que Bitcoin valga 100€ o 1M€, la red seguirá operativa y funcionando. A Bitcoin no le afecta el precio; el precio afecta a quienes compran o venden Bitcoins o hacen trading. Si quiero enviar 1000$ a un ruso (teniendo en cuenta que el sistema SWIFT está bloqueado para Rusia) no me importa el precio de Bitcoin. Voy a la casa de cambio, compro la cantidad equivalente en Bitcoin (0.0001 Bitcoin o 100 Bitcoins) y la envío a la billetera digital del ruso. Luego, el ruso va a su casa de cambio y convierte los Bitcoins en rublos (supongo que los dólares no le serán muy útiles), haciendo que el precio de Bitcoin sea totalmente irrelevante para mí y para él. A veces, al usar este ejemplo, me dicen «a los rusos ni agua», y otros argumentos similares. En mi ejemplo, el ruso es un miembro del partido opositor a Putin, y problema resuelto. También vuelvo al ejemplo de Internet. En Interdigital en el 2000 nos hicimos Sistema Autónomo y nos asignaron direcciones IP para dar servicios de hosting/housing. Podíamos pedir las IP’s que quisiéramos (eran gratis) y recientemente con la madurez de Internet hemos vendido ese direccionamiento IP a 24€ por IP (1024 IP’s)  y dices ¿por qué cojones no pedí las 16382 IP’s que podía haber pedido y cogí el mínimo que eran 2048? :( Las IP’s es un recurso finito que cuando se diseñó se calculó que era más que de sobras para toda la eternidad) 4.000 Millones de IP’s

 

Al comprender las implicaciones y el significado de Bitcoin, muchos comienzan a percatarse del monumental desafío que supone para la economía keynesiana. Esta realización a menudo provoca preocupación y el instinto inicial es buscar la prohibición o persecución de Bitcoin debido a los problemas potenciales que podría generar. Sin embargo, la caja de Pandora ya está abierta y hasta la fecha, ningún intento de prohibición ha impactado de manera significativa en el funcionamiento de Bitcoin. Y, como ya hemos visto, la tecnología no se puede frenar mediante discursos y amenazas. Si así fuera Internet no existiría. Por ejemplo:

Observemos lo ocurrido en julio de 2021: China prohibió la minería de Bitcoin y su uso. Esta acción no afectó significativamente al precio del Bitcoin y en unos pocos meses toda la maquinaria se trasladó a otros países. Contrasta esto con el cierre de fábricas de coches de combustión en Europa (suponiendo que las prohiben): la producción no se recupera en unos pocos meses. Bitcoin, por otro lado, demostró una impresionante resiliencia y capacidad de adaptación. Cuando todo esto se ha entendido puedes empezar a explicar porque cada 4 años se produce ese aumento de precio (que por otro lado yo considero que debería estar descontado aunque la gente no termina de pillarlo).

A partir de ese punto, y si quieren profundizar, creo que la lectura de libros como «El Patrón Bitcoin» y «La Filosofía de Bitcoin«, así como el análisis de datos de la Blockchain, deberían permitirte comprender de qué se trata realmente. Aunque hay que reconocer que existe el riesgo de que Bitcoin pueda fracasar en última instancia, considero que es imprescindible poseer al menos una porción correspondiente a tu riqueza actual, teniendo en cuenta que la riqueza mundial se divide entre 21 millones de bitcoins.

También les puede resonar escuchar a estos dos grandes economistas hablando de Libertad y Bitcoin Marc Vidal y Juan Ramón Rallo

Recuerda, cada Bitcoin se divide en 100.000.000 de Satoshis, por lo que 1000 satoshis son 30 céntimos de euros. Ya que otro de los temas recurrentes es «no tengo 30.000$ para comprar un Bitcoin».

Mientras escribo este post Alvaro de Maria ha publicado un Tuit tremendamente relacionado :D

Espero que te haya aportado valor.

UPDATE 29/11/2023

Jose Luis Cava economista y especulador de bien explica porque pese a que hace unos meses no creía nada en Bitcoin ahora ha cambiado de forma de ver este activo. Si quieres escuchar sus razones: https://www.youtube.com/watch?v=R5JDJO5F1To

UPDATE 30/03/2024

Otro economista que «ha visto la luz» Lunaticoin lo entrevista en https://t.co/RmcDzxLj8E

 

¿Eres economista? ¿Alguna cosa que quieras aportar?

¿Tienes un amigo economista? ¿Qué opina de Bitcoin?